El interés superior del menor debe estar siempre por encima de la igualdad entre progenitores.

El interés superior del menor debe estar siempre por encima de la igualdad entre progenitores.

miércoles, 21 de septiembre de 2011

El contramovimiento machista o Backlash - sus pretensiones

Hay una parte no desdeñable de hombres, significativa porque se hacen oír a golpe de artículos y piezas en los medios y a través de comentarios virtuales, hostiles e insultantes contra las mujeres, que se están moviendo para entorpecer el proceso. Entre ellos se encuentran maltratadores todavía no descubiertos (recordemos los dos millones aún no denunciados); personajes que después de un primer momento de estupor, cuando no daban crédito a lo que veían y oían (se empezó a hablar de mujeres maltratadas cuando muchos de ellos las venían sometiendo con total impunidad y naturalidad desde hacía décadas) se han visto obligados a diseñar otro tipo de estrategia más eficaz que la burda negación del problema. Son quienes han diseñado la ofensiva del “sí, pero no”. Admiten que hay bárbaros machistas, abusadores viles, que merecen un castigo (ya no es posible, al menos en España, negar los daños más cruentos), pero reducen tanto las cifras, que se trataría, según ellos, de un problema menor, “de una violencia más, como otras muchas; ni más ni menos”. Dicen defender a esas “pocas” mujeres que, por culpa de las medidas actuales, no pueden ser protegidas por la cantidad de recursos distraídos hacia las que, dicen ellos, fingiendo y poniendo denuncias falsas, acaparan los medios disponibles. Es un sector minoritario pero cada vez más presente, cuyo objetivo consiste en desactivar y entorpecer el camino de la igualdad en el que muchas mujeres y cada vez más hombres, se están involucrado.

No estamos yendo demasiado lejos; sólo los delincuentes que utilizan la violencia van demasiado lejos. Hay hombres que entienden y defienden la lucha de las mujeres. Ojalá sigan confiando en la justicia de sus reivindicaciones. Y que las manifestaciones que empiezan a verse de postmachismo no pasen de ser una excepción.

FUENTE: http://blogs.publico.es/